Alimentación
Para nosotros, porque lo es para vosotros, la alimentación es fundamental.
Sabemos que el momento de comer, no solo es un espacio para nutrirse, es mucho más. Se convierte en una experiencia sensorial, en un momento para recordar y revivir.
Además sabemos que es importante tener en cuenta la salud. Cada vez sabemos que hay más patologías que se ven afectadas por la alimentación. Desde diabetes, hipertensión, alergias, intolerancias, celiaquía, alteración de la deglución,… y la propia preferencia y las consecuencias sobre el estado de ánimo.
Por eso nuestros menús están elaborados por un equipo de nutricionistas que adaptan el menú basal a todas las particularidades que pueda haber.
Hay menús adecuados a las diferentes épocas del año, y cada día hay varias opciones alternativas para las personas a las que no les guste el menú del día.
Para personalizar aún más el proceso, cada dos meses hay una reunión con las personas residentes para que den un feedback sobre la experiencia gastronomía de esas semanas. En la reunión participan parte del equipo técnico, un responsable de cocina, dirección y el comité gastronómico.
Además cada mes hay un día especial en el que la comida se convierte en el hilo conductor para celebraciones. Ese día la comida es temática y con un talante emocional. Por supuesto hay comidas espaciales en Navidad, en el aniversario, en aquellos días en los que hay que celebrar la vida como en el día del padre o de la madre. Y no nos podemos olvidar de los postres caseros, que tan importante son para las personas residentes. Todas las semanas hay ricos postres hechos con mucho amor.
Las comidas se elaboran en la propia residencia, en una cocina equipada con todo lo necesario para que los platos se realicen con mimo y cuidado. Desde una máquina texturizadora para modificar la textura al gusto (textura crema, mouse,…), a horno de convección, cámaras con las temperaturas adecuadas al tipo de productos, freidoras, planchas, fuegos,…