Terapia ocupacional
La Terapia Ocupacional para adultos mayores ha sido indispensable en nuestra residencia desde que abrió sus puertas.
Tenemos claro que la autonomía de las personas es fundamental para que puedan disfrutar de su vida con plenitud. Entendiéndolo ser autónomo como tener la oportunidad de desarrollar todas las capacidades que tiene la persona, y para eso es preciso ver a la persona desde sus capacidades. A partir de ese punto las actividades se desarrollan para potenciarlas.
Para la Terapia Ocupacional a la persona se la ve desde un punto de vista integral, siendo conscientes de que para que alguien se sienta completo y autónomo, es necesario el equilibrio en el desarrollo de todas sus áreas. Por lo tanto, la intervención no será solo a nivel funcional, sino que se tendrá en cuenta la parte social, emocional, psicológica, cognitiva, física,…. La estrategia para ello es diseñar actividades ocupacionales para adultos mayores.
Solemos trabajar en grupo, sobre todo cuando se trabajan componentes cognitivos, haciendo que la actividad además de rehabilitadora sea significativa, gratificante y divertida.
También tenemos muy en cuenta toda la parte de socialización, intentando que la integración sea lo más rápida y agradable posible, y en pocos días empiecen a sentir que están en su nuevo hogar. Es muy importante tener en cuenta los intereses de la persona, qué actividades son significativas para ella, qué cosas disfruta más haciendo, también cuáles son sus necesidades, hábitos,… y a partir de ahí plantear planes de intervención personalizados.
Algunas de las actividades que se desarrollan se hace a partir de técnica de reminiscencia, orientación a la realidad, estimulación psicomotriz, estimulación sensorial a través del enfoque snoezelen, entrenamiento de actividades básicas e instrumentales de la vida diaria, trabajar la atención y concentración, motricidad fina y gruesa, arco articulares de miembros superiores, discriminaciones a nivel visual, implantación de sistemas aumentativos y alternativas de comunicación,…
Los beneficios de la Terapia Ocupacional en el adulto mayor son tan amplios como las áreas sobre las que se trabaja. Teniendo en cuenta que la meta es mejorar la calidad de vida de la persona, potenciar sus habilidades manteniendo sus destrezas, previniendo la dependencia y otros riesgos que conllevan las enfermedades a edad avanzada. Además de lo anterior, los beneficios será mucho mayores aún, ya que al conseguir esa premisa, logremos mejorar su estado de ánimo, su autoestima, la persona se sentirá empoderada, independiente, con más energía, ilusión, le resultará más fácil socializar,…
¿Qué personas se pueden beneficiar de la Terapia Ocupacional? En el campo de la geriatría y gerontología, se pueden beneficiar las personas mayores que conservan todas sus capacidades y destrezas ayudando a mantenerlas. Pero también las personas mayores que han sufrido fracturas de cadera, caídas de repetición, ACVs, cualquier otro tipo de lesión física, … Por supuesto, la terapia ocupacional para adultos mayores con enfermedad de Alzheimer, Parkinson o cualquier otra demencia será determinante para mantener las capacidades cognitivas, psicosociales y funcionales el mayor tiempo posible.
Las terapeutas ocupacionales son expertas en buscar soluciones. Para que una persona logre ser más autónoma ante una dificultad adquirida, la terapeuta podrá trabajar a nivel de rehabilitar para mejorar, mantener las capacidades o ralentizar el déficit de las mismas en caso de enfermedades degenerativas. Pero también es muy importante la función de compensar aquellas capacidades que no se puedan, temporal o permanentemente, recuperar. Esto es adaptar el medio para que la persona, de esta forma, sí pueda ser autónoma. Puede ser con ayudas técnicas como sillas de ruedas, andadores, bastones que les permitirá adquirir una autonomía en los desplazamientos. Pueden ser cucharas adaptadas, calzadores, mangos para alcanzar objetos, lupas, atriles,… hay un sinfín de artículos que facilitan realizar muchas actividades, dando a la persona la posibilidad de realizarlas de manera independiente. Y también se puede adaptar el medio. La residencia es de por sí un entorno accesible, no obstante puede haber particularidades de la persona que requiera de carta adaptación especial del medio para mejorar su autonomía. Pueden ser indicaciones lumínicas o sonoras que les facilite la orientación, ocultar ciertos elementos, carteles explicativos,…
Las terapeutas ocupacionales también tienen un papel indispensable en el proceso de eliminar sujeciones mecánicas. En la actualidad estamos en proceso de convertirnos en centro libre de sujeciones. Para conseguirlo tanto ellas como el resto del equipo motor, junto con el asesoramiento de la Fundación Cuidados Dignos, a través del diseño de un métido de vigilancia y acompañando al resto del equipo de atención directa para que con el cambio de mirada también logremos retirar del todo las sujeciones. El objetivo es convertirnos en centro libre de sujeciones en 2022, y obtener la certificación correspondiente LiberaCare.